Los desechos alimentarios y la hambruna amenazan nuestro futuro

Luisondome Unos niños almuerzan en Sudán del Sur. WORLD VISION Hay un dicho en el ámbito del desarrollo internacional que merece la pena recordar: las guerras son difíciles de parar, las hambrunas no. Comienza esta historia en cierto lugar costero de la pintoresca Sunderland, Inglaterra, que fue sede de una competición de triatlón muy reñida, que como es sabido es un deporte que implica la realización de 3 disciplinas deportivas, natación, ciclismo y carrera a pie, que se realizan en orden y sin interrupción entre una prueba y la siguiente. En la citada competición participaron 57 atletas, que tras la prueba, tiempo después, fueron víctimas de una ola de enfermedades y diarrea después de la carrera, dada la contaminación del lugar por las descargas de aguas residuales, en las aguas en las que tuvo lugar la prueba. Algo parecido sucede en el lugar donde resido, una zona de costa recogida en forma de fiordo que da al Atlántico, en la que periódicamente nos cierran las playas ...