La catástrofe climática está aquí, y nadie parece entenderlo

Walter H. Groth

Foto de Chris Gallagher en Unsplash

Prólogo

Durante las últimas semanas, olas de calor insondables golpearon y siguen golpeando la costa oeste de Estados Unidos y Canadá. El estallido de enormes y violentos incendios forestales fue el resultado lógico que destruyó todo a su paso. Se puso -el suelo- tan caliente que el agua que cayó de los aviones de extinción de incendios se evaporó antes de que pudiera tocar el suelo.

Aldeas enteras fueron consumidas por los incendios en un par de horas. La gente tenía apenas unos minutos para huir dejando atrás sus pertenencias, que en la mayoría de los casos se perdían en los incendios.

La gente moría por cientos a causa del insoportable calor. El cuerpo humano no está preparado para soportar temperaturas tan altas, por lo que su cuerpo no puede adaptarse a ellas. La escala de los termómetros de fiebre no supera los aprox. 41 ° C o 106 ° F, porque más allá su cuerpo comienza a morir.

En California, la sequía es tan severa que los depósitos de agua están en su punto más bajo. El lago Powell y el lago Mead, los embalses más grandes, ya no pueden manejar la demanda de agua debido a la sequía.

En otras palabras, las olas de calor, las sequías y los incendios son tan devastadores que la gente tendrá que considerar irse, por ejemplo, de California y encontrar un nuevo lugar lejos de esas condiciones catastróficas. La pregunta es ¿adónde ir?

Mientras tanto, en Europa, Bélgica y Alemania se vieron afectados por lluvias masivas que inundaron las regiones afectadas y también destruyeron pueblos enteros. Más de 160 personas estaban muriendo y seguían contando las víctimas. Aún faltan más de 1300 personas -que están desaparecidas-.


Hasta ahora, la gente solo sabía de estas catastróficas inundaciones repentinas por las noticias de países lejanos como India, Filipinas y demás. Allí vimos gente esperando en sus techos a ser rescatados en helicóptero mientras todo a su alrededor estaba completamente inundado. Ahora también lo tenemos aquí.

Rara vez los científicos estuvieron de acuerdo en algo tan claramente como lo hacen -ahora- con el impacto de los cambios climáticos provocados por el hombre. Los devastadores incendios forestales en este momento en el oeste de EE. UU. y Canadá y también las devastadoras inundaciones en Europa son un resultado directo de la catástrofe climática provocada por el hombre.

El gobernador de California, Gavin Newsom, no se anduvo con rodeos cuando habló sobre la catástrofe de calor allí. Dijo que lo que la ciencia ya había predicho en sus peores escenarios estaba sucediendo ahora, décadas antes de lo previsto.

Estos no son eventos aislados de una sola vez. Todo lo contrario. Tendremos que soportar estas catástrofes durante los próximos 80 años más o menos. Y gradualmente estos empeorarán y afectarán con más frecuencia. Sí, me escuchaste bien, ya no van a desaparecer.

Esta vez Europa tuvo las inundaciones y América del Norte las olas de calor. La próxima vez podría ser al revés.

La infraestructura en las áreas afectadas quedó casi completamente destruida. Calles, autopistas, vías férreas, suministro de agua potable, líneas eléctricas, comunicaciones móviles, etc. se encuentran entre muy dañadas y totalmente destruidas. Munich RE dice que la reparación de daños en Alemania costará miles de millones de euros y llevará bastante tiempo, tal vez un par de años.

Mientras tanto, las víctimas de estos eventos catastróficos lo han perdido básicamente todo, y más de 160 personas solo en Alemania pagaron el precio máximo por perder la vida. Como Munich RE comentó además, todo esto era completamente previsible y han advertido sobre esto hace muchos años sin éxito.

Y aquí está el comentario de Armin Laschet (gobernador de NRW y candidato a canciller del partido conservador gobernante en Alemania) mientras visitaba la zona de desastre en su estado natal, Renania del Norte-Westfalia / NRW): “Porque hoy es uno de estos días, tu no cambies tu política ". No se puede ser más cínico y estúpido.

Solo tengo una pregunta: ¿cuándo la gente dejará de votar por estos políticos, estos partidos políticos que se niegan a hacer lo que se requiere? ¿Los políticos y sus partidos ignoran su juramento de proteger a su pueblo y, en cambio, reconocen que la gente tiene que morir? ¿Cuándo será el dolor lo suficientemente grande?

La conclusión es que tenemos que dejar de fingir que podemos negociar con las fuerzas de la naturaleza. La catástrofe climática es, con mucho, el mayor desafío al que nos enfrentamos la humanidad, eclipsando todo lo demás.

Lo supimos desde el principio, al menos desde principios de los setenta. El hecho de que estamos donde estamos ahora puede atribuirse claramente a nuestro liderazgo político incompetente, ignorante y descuidado.

Sin embargo, también debemos responsabilizar a nuestras sociedades tan educadas y desarrolladas, a nuestros ciudadanos, que contribuyeron felizmente con su comportamiento a esa crisis mundial. ¿Calentamiento global? No, es calentamiento global.

¿Ahora que?

Ya ni siquiera es gracioso ver a nuestros políticos hablar sobre una ventana de tiempo que todavía tenemos para detener el calentamiento global. Algunos dicen 15 años, otros más como 8 años, como si fuera un juego. No lo es. Y ya no tenemos ese tiempo.

¿Cómo puede una persona mentalmente cuerda decir esto mientras se encuentra en medio de la destrucción causada por insondables inundaciones y furiosos incendios forestales durante un calor insoportable?

¿Cómo pueden los líderes de un partido político que, por ejemplo, en Alemania, ha estado gobernando por 16 años, todavía insistes en que hicimos “buenos avances” en la reducción de la emisión de dióxido de carbono? Hasta ahora y durante casi 50 años no se hizo nada significativo, a pesar de las terribles advertencias de nuestros científicos.

¿Por qué deberíamos creer una palabra de lo que están diciendo frente a estos desastres climáticos que nos suceden?

Desafortunadamente, nuestro liderazgo político mantuvo a la mayoría de las personas en la oscuridad con éxito, las engañó intencionalmente, cuando se trata de las consecuencias de no actuar con prudencia a tiempo. Seguro, muchos de nuestros ciudadanos aceptaron con gusto lo que les dijeron, era la salida más fácil y no se requería ningún cambio.

Mire también a Estados Unidos. En 2016 eligieron presidente al rey mentiroso Trump. Y esta bola de demolición andante destruyó con éxito todo lo que no le gustaba. Incluso intentó destruir la democracia en Estados Unidos, pero fracasó. Por el momento, al menos. Sus cuatro años a cargo supusieron un duro golpe a sus esfuerzos por reducir las emisiones de dióxido de carbono. Su movimiento característico consistió en abandonar el Acuerdo de París sobre el clima.

Ahora, con Joe Biden como presidente, Estados Unidos se reincorporó al Acuerdo de París. Además, Biden dio a conocer su ambicioso plan para que Estados Unidos se convierta en carbono neutral para 2050. Bueno, existe este pequeño detalle llamado congreso, y específicamente el senado. Dudo que Biden tenga la oportunidad de aprobar su plan.

En conclusión, es difícil mantenerse optimista dadas estas circunstancias. En este momento estamos en un camino claro para erradicar nuestra propia especie de este planeta muy pronto. Al igual que ya lo hicimos con éxito con otras especies.

La tarea

Es bastante simple, pero nada fácil. ¡Debemos actuar ahora! ¿Quién? ¡Todo el mundo! Es un esfuerzo coordinado y orquestado a gran escala. Para tomar prestado un término que lo clava, es un juego multijugador masivo en tiempo real con un objetivo para todos nosotros:

Deteniendo el calentamiento global ahora.

Eso es todo. Es, si es así, el juego final. Y lo ganamos juntos o lo perdemos juntos en la próxima década. Es un desafío como ningún otro antes. Y decide el futuro, o la falta del mismo, de nuestros hijos y nietos,

Afectará todo lo que hacemos, cada uno de nosotros. Podemos dividirlo en tres categorías:

1. Indispensable

2. Necesario

3. Agradable tener

Indispensable

Eso es todo lo que contribuye directa e inmediatamente a eliminar o, al menos, reducir significativamente las emisiones de carbono.

Necesario

Todo lo que se suma para aumentar la sostenibilidad como, entre otros, la acumulación de energía renovable a un ritmo muy rápido para compensar el cierre de la energía fósil.

Agradable  de tener

Mientras el calentamiento global no se detenga por completo, no habrá nada "bueno" para nadie. Todo lo que entra en esa categoría debe eliminarse de inmediato.

Sí, soy plenamente consciente de la magnitud de esta empresa y de lo que significa para todos. Es la llamada más difícil que haya tenido la humanidad. Podríamos haber evitado medidas tan drásticas, si tan solo hubiéramos hecho lo que se requería durante los últimos 50 años. No lo hicimos.

La gran mayoría de nosotros decidimos ignorar la amenaza que se avecinaba. Y ahora la factura está vencida. Y va a ser terriblemente caro. El precio que todos tenemos que pagar ahora, porque una gran mayoría de personas eligió su conveniencia individual, su placer personal sobre el bienestar común.

Y sí, tiene que empezar en los países ricos. Los países que hicieron su riqueza desde el comienzo de la industrialización, arrojando grandes cantidades de dióxido de carbono a la atmósfera. Estos países deben ser los primeros en detener eso.

¿Es factible?

Respuesta corta: lo es.

Sin embargo, requiere un esfuerzo unido de toda la humanidad, dejando de lado todos los demás problemas y trabajando juntos. Y debe empezar ahora. No hay más tiempo que perder como muestra la naturaleza a través de estos desastres naturales que azotan todo el mundo.

La buena noticia es que tenemos todo lo necesario para ganar el juego y detener el calentamiento global. Tenemos ciencia, tecnología y la capacidad intelectual sobresalientes necesarios para tener éxito. Sin embargo, hay un obstáculo importante: ¿tenemos la voluntad de hacerlo, de hacerlo juntos y de hacerlo ahora?

Significa sacrificios para todos, algunos más pequeños y otros más grandes. Sin embargo, en mi opinión, ese es un pequeño precio a pagar para brindarles un futuro a nuestros hijos y nietos.

Coda

Me encantaría ser optimista sobre la probabilidad de que esto suceda. Sin embargo, el tiempo y la experiencia me han enseñado a ser realista. Con toda probabilidad, lo mejor que podemos esperar es que al menos algunas naciones hagan lo que se requiere. Desafortunadamente, eso no es lo suficientemente bueno para resolver el problema.

Lo más difícil es deshacerse del pensamiento del siglo pasado. Hay una cita atribuida a Albert Einstein que lo resume:

Ningún problema puede resolverse desde el mismo nivel de conciencia que lo creó. Ese es el quid del asunto. Y el pensamiento, especialmente el pensamiento crítico, es escaso. 

Se nos dice que las naciones del G7 y la versión extendida de las naciones del G20 ahora están discutiendo seriamente las medidas. Amigos, eso es demasiado poco y demasiado tarde. ¡Deja de hablar y empieza a actuar!

Se nos dice que no es tan fácil. Se nos dice que hay tantos intereses particulares de los diferentes jugadores en juego, por lo tanto, llevará mucho más tiempo llegar a un acuerdo. Como de costumbre, este será el mínimo común denominador. Por lo tanto, detener el calentamiento global seguirá siendo una quimera.

Esta es mi suposición basada en muchos años de experiencia con seres humanos:

Después de muchas conversaciones prolongadas entre políticos de, por ejemplo, el G20, se decidirán algunas medidas tibias. Y, por supuesto, esos no entrarán en vigor de inmediato.

Además, la mayoría de nosotros simplemente continuaremos viviendo nuestras vidas como de costumbre, conduciendo nuestros grandes SUV de gasolina, comiendo toneladas de carne, disfrutando de las vacaciones y preferiblemente volando a países lejanos. Pero ahora tienen bolsas de mano sostenibles para sus recados, porque, ya sabes, debemos proteger el medio ambiente.

Para nuestros hijos, los recién nacidos, esa es una perspectiva bastante sombría. Ellos heredarán de nosotros un mundo donde la vida se ve amenazada cada día más. Fuertes incendios, inundaciones catastróficas, escasez de agua potable, etc. serán lo normal. Gracias a esta actitud cínica de no hacer nada de los mandatarios hoy, dirigentes políticos y económicos, pero también cada uno de nosotros negando un futuro a nuestros hijos.

Se me ocurre una última pregunta: ¿dónde están hoy los músicos, los artistas, protestando por lo que está pasando? Aquí hay un ejemplo de los años sesenta para ilustrar lo que quiero decir:

Necesitamos desesperadamente personas que defiendan el futuro de nuestros hijos. Canta si puedes cantar, escribe si puedes escribir, hazlo. Haz lo que sea que puedas hacer, ¡pero haz algo!

Es tu turno.

Walter H Groth

El artículo ha sido traducido por L. Domenech

El original ha sido publicado en Medium / Un futuro para nuestros hijos

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