Señales de cambio: por qué un mundo con cero emisiones netas para 2050 está al alcance de la mano

POR TALAL RAFI | 8 DE JUNIO DE 2022

El Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) establece que para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ℃ por debajo de los niveles preindustriales, las emisiones deberían alcanzar su punto máximo antes de 2030 y las emisiones netas cero a nivel mundial deben alcanzarse para 2050. Se define el cero neto cuando las emisiones totales son menores o iguales que las emisiones eliminadas del medio ambiente.

Pero establecer objetivos netos cero, en comparación con lograrlos, es la parte fácil. Afortunadamente, las condiciones y el apoyo necesarios para lograr estos objetivos se fortalecen a diario. Y con tal impulso, hay muchas posibilidades de que aseguremos un mundo con cero emisiones netas para 2050. No tenemos más remedio que hacerlo.

El cambio climático es considerado por muchos como la mayor amenaza a la que se enfrenta la humanidad en el siglo XXI. Sus efectos ya se están sintiendo ampliamente. Las perturbaciones económicas, los disturbios políticos, las guerras, el aumento de los desastres naturales, los extremos climáticos y la seguridad alimentaria y del agua son solo algunos de los efectos del calentamiento global. Cuanto más tarde el mundo en alcanzar el cero neto, más difícil será revertir el cambio climático, lo que lo convierte literalmente en una carrera contra el tiempo.

Beneficios de la descarbonización

La descarbonización no se trata solo de salvar al mundo del desastre climático, sino que también puede ser una fuerza impulsora para generar ganancias y conducir a un crecimiento sostenible a largo plazo. Un modelo de operación más ecológico también da como resultado un proceso más ágil con menos desperdicio y mayor eficiencia.

En un mundo globalizado, con muchos países estableciendo objetivos netos cero , la descarbonización es necesaria para sobrevivir. Muchos gobiernos y grandes multinacionales con cadenas de suministro globales se han comprometido con la neutralidad de carbono para sus cadenas de suministro. Y miles de actores no estatales, desde bancos hasta ciudades, se han unido a Race to Zero .

Hay múltiples señales positivas de cambio. La demanda de productos ambientalmente sostenibles está aumentando entre los consumidores, especialmente entre las generaciones más jóvenes, con el 73 % de los consumidores de la Generación Z dispuestos a gastar más en productos sostenibles.

Los desafios

El almacenamiento de energía es un desafío importante que afecta la descarbonización, especialmente en los sectores de energía y movilidad. La producción de energía renovable a partir de la energía solar y eólica no está disponible todo el tiempo en una cantidad constante. Los informes climáticos pueden ser complicados con diferentes marcos que se utilizan. Aunque el 90% de los ejecutivos del sector privado creen que la sostenibilidad es importante, las estrategias de las grandes corporaciones a menudo pueden orientarse hacia las ganancias a corto plazo y los objetivos de crecimiento, lo que hace que la descarbonización a largo plazo sea un desafío. Por último, las inversiones verdes pueden tener retrasos de hasta dos años debido a las regulaciones gubernamentales.

A pesar del rápido cambio exponencial en el sector de las energías renovables, el almacenamiento de energía sigue siendo un gran desafío / Unsplash.

Descarbonización de sectores clave

Energía y producción energética : la descarbonización en este sector requerirá la construcción de sistemas de energía que puedan satisfacer la demanda y también aumentar la generación de energía renovable. Los costos de la energía solar y eólica se han reducido sustancialmente durante la última década, lo que ha dado como resultado que las energías renovables puedan competir económicamente con el carbón y el gas natural. Las grandes compañías petroleras pueden hacer un gran cambio ya que tienen la experiencia operativa, las cadenas de suministro y el capital para crear iniciativas de generación de energía renovable. El factor de seguridad energética que ha pasado a primer plano con la guerra entre Rusia y Ucrania y el aumento de los precios del petróleo harán que la transición a cero emisiones netas sea más atractiva desde el punto de vista político y económico en los próximos años.

Movilidad : el cambio hacia los automóviles eléctricos está cobrando impulso, no solo con el interés mostrado sino también con el flujo de inversión. Según PwC , alrededor de dos tercios de la inversión en tecnología climática se destinó a la movilidad y el transporte. Pero para descarbonizar el sector de la movilidad se necesitan una serie de transiciones a gran escala. Se necesitan capacidades de fabricación, talento humano y nuevas cadenas de suministro. La transición de este sector a cero neto depende de la construcción de una red de estaciones de carga y un mejor almacenamiento de baterías: ciertas materias primas para las baterías de automóviles provienen de algunos países como la República Democrática del Congo, que tiene el 50% de las reservas mundiales de cobalto y el 58% de reservas mundiales de litio encontradas en Chile.

Agricultura y alimentos : según un nuevo estudio de las Naciones Unidas , el 31 % de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero causadas por el hombre se originaron en los sistemas agroalimentarios y el 80 % de la deforestación mundial es el resultado de la producción agrícola. Hay un cambio constante hacia la carne de origen vegetal, que se espera que sea una industria de $ 160 mil millones para 2030 y la industria de la carne cultivada tenga un valor de más de $ 90 mil millones para 2030. La agricultura vertical puede ser una forma efectiva de descarbonizar este sector, ya que emite el 70% menos carbono en comparación con la agricultura tradicional y, al estar ubicado en las ciudades, no necesita mucho transporte. Hay interés de inversionistas en agtechcon un enfoque climático ya que existe una demanda de inversiones amigables con el clima y seguridad alimentaria.

La descarbonización es esencial en el impulso global hacia el cero neto. Tiene muchos desafíos, pero con un apoyo cada vez mayor a la sostenibilidad ambiental, las inversiones verdes y la innovación climática, los sectores clave pueden descarbonizarse y avanzar hacia un cero neto.

Talal Rafi es un consultor global sobre desarrollo sostenible y tiene su sede en Sri Lanka. Talal está en el Equipo Global de Deloitte sobre Clima y Sostenibilidad y es miembro de la Red de Expertos del Foro Económico Mundial. Su trabajo ha sido publicado por el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Asiático de Desarrollo, el Foro Económico Mundial, la Escuela de Economía de Londres y Forbes.

Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor únicamente y no las de los campeones de alto nivel del cambio climático de la ONU .